Todos hablamos continuamente de la digitalización y de cómo esta ayuda a gastar menos papel y a generar menos basura. Pero ¿cómo de sostenible es la digitalización?
Es verdad que gracias a la digitalización se pueden evitar muchos gases de efecto invernadero (GEI): por ejemplo gracias a la reducción de viajes para tener reuniones con gente de otros países, por la adopción de sistemas y plataformas de videoconferencia como Zoho Meet, se ahorran muchos GEI que se gastarían en combustible de aviones, trenes o coches.
Sin embargo, se utiliza energía eléctrica para que las herramientas funcionen y, si las fuentes de esta energía no son limpias, pueden perjudicar al medio ambiente y emitir CO2 en grandes cantidades. Además, se produce mucha polución a la hora de crear y manufacturar productos como teléfonos, ordenadores, etc. Y esto sin contar con los materiales que todos estos aparatos contienen y que no solo no son reciclables, sino que también son muy contaminantes, por lo que hay que encontrar un adecuado equilibrio para hacer sostenible la huella de carbono de procesos y operaciones.
Algunas de las empresas más grandes del mundo ya se han puesto manos a la obra para ser 100% verdes y para causar el menor impacto posible al medio ambiente:
- Google. Esta multinacional se ha convertido en el mayor comprador corporativo de energía renovable del mundo, y esperan operar con energía libre de carbono en 2030. Ha lanzado, junto con otras 300 empresas, la Alianza de Compradores de Energía Renovable.
- Amazon. El gigante se comprometió en 2019 a no emitir carbono a la atmósfera en 2040 mediante diferentes acciones que se implementarán en los próximos veinte años. Algunas acciones que llevarán a cabo son: utilizar electricidad de fuentes renovables, comprar vehículos eléctricos y hacer envíos con cero emisión de carbono, entre otras.
- Telefónica. La empresa ya ha logrado reducir sus emisiones de carbono en un 60% en los últimos cinco años. Aseguran utilizar solo energía renovable en Europa y en Brasil y recientemente han redoblado su compromiso con el medio ambiente. Esperan conseguir no emitir carbono en todas sus operaciones internacionales en 2040.
Estas son algunos ejemplos de empresas que se han sumado a diferentes iniciativas para reducir su huella de carbono y ayudar a salvar el planeta. Pero no son las únicas, cada vez más compañías están tomando partido en esta mecánica.
Contacta con nosotros y te apoyamos en tu proceso de cambio.