La pandemia ha afectado a los consumidores y a varios sectores económicos
En el último año se han visto varios cambios en el comportamiento de los consumidores tras la Covid-19, así como en sus hábitos de compra, que ha provocado una reducción del gasto, el interés y confianza en la sociedad.
Sin embargo, en los últimos meses se está observando un progreso y reversión en el cambio de hábitos de consumo, ya que la situación está mejorando debido a el aumento en la vacunación a la población y a la eliminación progresiva de las restricciones.
Esto ha supuesto una mejora en algunos sectores que se vieron afectados al principio de la pandemia como los viajes (en abril de 2020 los países que aportaban el 50% de turistas a España solo aportaron un 15%) , la moda y la hostelería, entre otros.
Durante este período de pandemia, el consumidor ha sufrido una serie de cambios en el aspecto psicológico, debidos a la incertidumbre generada en esta pandemia, ya que se han visto en peligro sus ingresos por la inestabilidad laboral, la socialización ha ido descendiendo…
Como consecuencia, el consumidor ha vivido ciertos cambios a nivel personal, como el aumento de hábitos saludables, como el deporte o una alimentación sana y también ha invertido más en formación para mejorar su posición en el ámbito laboral. Todo esto lo ha hecho de forma digital. En las encuestas realizadas por Deloitte (referenciadas al final de este artículo), se desprende que un 40% de personas haría uso de apps de fitness online y estudiarían a través de los portales web de sus universidades.
Y ahora ¿qué está pasando? ¿los consumidores se han vuelto más fuertes?
Desde hace unos meses, cuando se eliminaron ciertas restricciones y aumentó el ritmo de vacunación, el consumidor se ha vuelto más activo. Ha vuelto a moverse por centros comerciales, hoteles, teatros, restaurantes…
Esta situación ha influido de forma positiva en la economía de ciertos sectores. En concreto, ahora en verano, el sector turístico (que fue el año pasado uno de los más afectados) da signos de recuperación.
Se ha potenciado el turismo nacional, que es más controlable y seguro, y se ha implantado en la mayoría de establecimientos la posibilidad de la cancelación gratuita de la reserva.
Como se ha dicho, el consumidor está más preparado para la compra, por lo que ha aumentado el gasto en varios sectores. Por ejemplo, el gasto medio de los consumidores en verano se ha situado en 914 euros, un 42% más que en 2020, según el informe “El gasto real de los españoles en verano” de El observatorio Cetelem Estacional.
Aunque a la hora de grandes inversiones, el consumidor se vuelve más cauteloso porque ya no comprende una situación mundial estable.
Por otro lado, las marcas han tenido que adaptarse a los cambios, al igual que los consumidores. Han mejorado la experiencia servicio/producto y la relación con los clientes, la digitalización ha estado presente en una gran cantidad de empresas que sin ella no habrían podido sobrevivir a esta crisis. Además han adaptado su mensaje a la situación psicológica que tienen la gran mayoría de personas y han dado prioridad a las emociones en sus mensajes.
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Fuentes:
Informe: Camino hacia la recuperación. Perspectivas sobre el comportamiento del consumidor. 30 de abril de 2020. Deloitte.
Informe: Consumidor año 1 d.C. El nuevo consumidor después del Covid-19. Mayo de 2020. Deloitte
Informe: El gasto real de los españoles en verano. 1 de septiembre de 2021. El observatorio Cetelem Estacional.